Caffarena, confección bajo otra mirada
En tiempos que las producciones de retail corren en serie, hay marcas que mantiene el formato “hecho a mano”, todo un lujo que pone en valor esta tendencia dentro la industria de la moda.
Solo tres máquinas textiles sonaban en el taller ubicado en calle Compañía con Cueto, en el año 1920. Se trataba de los inicios de la fábrica Caffarena en la confección de medias de seda natural, gracias a las manos de un grupo de mujeres que dieron vida a esta prenda de lujo para la época; un completo desafío en el que debieron aplicar destreza, creatividad, calidad e innovación exigida en la época.
A pesar de que el pequeño taller del centro de Santiago se convirtió en el principal actor de la industria textil nacional, la elaboración manual de pantys no desapareció del inventario y se mantiene hasta la actualidad.
La preocupación por desarrollar una prenda tan fina demandó la habilidad de cada una de sus colaboradoras, las que hoy suman alrededor de 250, y que permiten vestir las piernas no solo de las chilenas, sino que también de: argentinas, uruguayas, peruanas, mexicanas, dominicanas, paraguayas, bolivianas, estadounidenses y neozelandesas.
CONSUMIR MODA DE OTRA MANERA
Para otorgar valor al trabajo desarrollado por las expertas de la marca, cada envase cuenta con una etiqueta que registra el día y turno en que se elaboró el producto, un sello que confiere autenticidad y da cuenta del talento de la confección artesanal; sinónimo de calidad que conlleva un sentido emocional del cual los productos industrializados carecen, un completo valor agregado que se impregna a una prenda tan esencial.
Disfrutar una panty Caffarena, es invitar a apreciar un producto hecho a mano por y para mujeres, es valorar una prenda delicada que cambiamos como algo desechable, pero que esta vez usaremos con conciencia de que lo autentico y confeccionado por la dedicación humana se mantienen para revigorizar el mercado de la moda.
Instagram: @caffarenachile