¿Cómo ejercer la crianza respetuosa? Cinco consejos para crear un vínculo cercano con tu pequeño

Los niños y niñas son como una esponja, absorben toda la información que les rodea. Mientras más respeto y cariño les demuestres y enseñes, esto los guiará por el resto de su vida. Huggies, marca comprometida con el cuidado de los bebés y niños en cada etapa de su crecimiento, comparte algunos consejos para que puedas generar una relación cercana y sana con tu hijos e hijas. 

En estos días en que se celebra el Día del Niño, es importante hacer hincapié en que esta, además de ser una celebración dedicada a la infancia, es también una fecha importante para padres y madres y para el fomento de una crianza respetuosa; por qué ¿qué mejor que tener una relación respetuosa y de confianza con tus hijos?

Para muchos padres, forjar una relación cercana con su pequeño se da una manera fácil y natural, pero existen casos en que esto se torna un poco más complejo. Todos tenemos personalidades diferentes y eso influye mucho a la hora de generar un vínculo. La buena noticia es que existen diversas formas para generar confianza y nutrir de conocimiento a tu hijo o hija y que se pueden poner en práctica fácilmente.

En este sentido, Huggies, la marca para el cuidado infantil de Kimberly-Clark, da algunas ideas para que padres, madres y tutores puedan afianzar estos aspectos, y así construir una relación afectiva y respetuosa.

1. Jueguen juntos. Al jugar con tu hijo o hija le mostrarás que son valorados y que son una persona divertida. Dale tu atención completa en ese momento. Los niños aprenden muchas cosas nuevas mientras juegan, pueden incluso mejorar su lenguaje, el manejo de sus emociones y sus habilidades sociales contigo o con sus pares.
2. Mantén conversaciones. Pon interés en lo que tu hijo o hija tenga que decir. Estar interesado por cosas banales, preguntas y sus sentimientos fortalecerá su personalidad para que en el futuro forje su opinión y perspectiva sobre el mundo. Además, sentirá que sus opiniones importan y, en el futuro, tendrá seguridad al hablar, expresarse y opinar.
3. Responde a sus necesidades. Si está triste y quiere un abrazo, dáselo y comprende que también es una persona con sentimientos. Hazle entender que sus emociones son válidas y comprendidas.
4. Déjalo ser independiente. Permite que haga cosas por sí mismo, prefiere a ayudarle con instrucciones y elogia sus esfuerzos. Que se encargue de ponerse el pijama, que elija la ropa para el día y cepillarse los dientes puede realmente fomentar la independencia y su autoestima. Alégrate cuando haga algo correcto.
5. Si sufre escapes de orina en la noche, no lo regañes. Muchos niños y niñas tienen problemas para mantenerse secos durante la noche, claro, son niños y no lo hacen de manera intencional. De hecho, en ocasiones esto se relaciona con si algún familiar o un padre sufrió lo mismo en su niñez. Compresión y apoyo son esenciales. La clave para ayudar a tu hijo o hija a lidiar con sentimientos de frustración está en ser comprensivo y realista. Este último punto tiene especial relevancia ya que de acuerdo con la información que los padres pueden encontrar en la plataforma de Huggies cl, el 20 % de los niños de 5 años todavía moja la cama en las noches, el 12 % de los niños de 6 años continúa teniendo accidentes nocturnos, y el 15 % de los niños que moja la cama en las noches deja de hacerlo año tras año a partir de los 6.

“Desde Huggies queremos estar presentes en este camino de ser padres. Por eso, además de poner a disposición toda nuestra línea de cuidado infantil, buscamos también promover el fortalecimiento de los vínculos a través de la coparentalidad y una crianza respetuosa. Son aspectos que marcarán un desarrollo sano en los niños, les darán las herramientas necesarias para la adultez y generaran una relación de confianza entre padres e hijos, no sólo durante la infancia, sino que se mantendrá a lo largo del tiempo”, asegura Stephanie Garriga, Brand Manager de Huggies.

Todos estos consejos te ayudarán a generar un buen trato con tu hijo o hija, forjarán la confianza y seguridad de que jamás los juzgarás y acudirán a ti cada vez que lo sientan necesario. ¡No sólo serán respetuosos contigo, sino amables con todos quienes le rodeen!